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Educar los sentidos desde el contacto con la Naturaleza

La mayor parte de nuestros niños y jóvenes viven en un mundo dominado por la imagen, plana, bidimensional y comercial. Así como cada día tiene menos posibilidades naturales de educar sus emociones o la forma de comunicarse, mucho menos tiene la posibilidad de educar sus demás sentidos o de interactuar con la naturaleza. Para colmo de males las poquísimas veces que sacamos a nuestros hijos a zonas verdes se trata de jardines artificiales, rectos, sin variedad ni color.

Pero muchos de nosotros disfrutamos de espacios abiertos y salvajes, naturaleza real y es eso lo que te proponemos en la Granja la Cascada. Hoy queremos darte algunas ideas de cómo educar todos los sentidos en el encuentro con la naturaleza, y es válido tanto para niños como para jóvenes y adultos, te imaginas lo divertido de estos ejercicios con tu pareja por ejemplo:

1.       El juego del lazarillo, donde una persona guía a la otra que va vendada de los ojos; pero además en este caso lo hacen por los senderos naturales de granja escuchando insectos, el agua de la quebrada el sonido de los pájaros o de los osos perezosos en las montañas cercanas.

2.       Igualmente con los ojos vendados pomo s hacer un concurso en donde los chicos toquen seres de la naturaleza e intenten adivinar que es: musgo, helechos, cortezas de árbol, pasto, flores, agua…

3.       Maravilloso poder realizar un ejercicio de silenciamiento y meditación en lo alto de la montaña y permitirles encontrar y disfrutar los sonidos propios como el viento, los árboles o las aves a su alrededor.

4.       Y que tal una actividad por grupos donde durante el recorrido escriban o graben su propia descripción de olores como los de la gallina, la vaca, las flores, la quebrada limpia, el musgo, las palmas bobas, entre otros. Los podrías describir bien tú?

5.       Después de un rato de caminata, al final del día nada más delicioso que sentir el frio del agua que corre en la quebrada sobre tus propios pies y manos.

6.       Que tal binoculares para buscar arboles lejanos o aves? ¿Qué tal lupas para observar texturas e insectos?

 

7.       Durante el recorrido y con un guía que pueda prever peligros, podemos también probar algunos sabores de frutos silvestres, o incluso musgo, siempre bajo supervisión del guía.

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